¡Augusta Reina!

Continuando la serie de formaciones, conozca uno de los tipos caracterológicos cuya fuerza es la diversión. Es el Temperamento NERVIOSO.

Leer más: ¿Qué es el temperamento? ¿Cómo puedo descubrir el mío?

Recuerde: para esa formación se utilizaron los ocho posibles temperamentos, definidos por Le Senne, Gaston Berger y, después, por el Pe. Luigi Maria Rossetti en el libro Práctica de Caracterología religiosa, escrito en 1961. Por lo tanto, esta formación está basada en la obra citada. Son ellos: Colérico, Enamorado, Nervioso, Sentimental, Sanguíneo, Flemático, Amorfo y Apático.

LA DIVERSIÓN es el valor dominante del Nervioso

Por ser no Activo, no siente la necesidad de realizar lo que la emoción le inspira. No realiza un proyecto o decisión con reflexión, rigor y orden, sino que busca resultados que le cuestan poco.
Por ser Primario tiene reacciones inmediatas e impulsivas, de modo que cambia de humor conforme a la emoción del momento. Pasa fácilmente de la alegría a la tristeza.
Por ser Emotivo es muy sensible, y siente la necesidad de tener emociones, de vivir intensamente y de manera entusiasta.

Virtudes y defectos predominantes:

– Virtudes que pueden prevalecer: generosidad; intensidad en el actuar; tendencia a la alegría; en general, agradable en el trato, optimista y afable; entusiasta; en general, abierto al trato con otro, con una tendencia a la bondad y la compasión; facilidad para la predicación, con expresión viva y espontánea; en general, imaginación viva; siente fácilmente la influencia buena y la fascinación de una persona, a quien después busca imitar.

– Defectos que pueden predominar: tendencia a ser muy emotivo, intenso, superficial y basar sus decisiones en la emotividad, es decir: abundancia de sentimientos, sujetos a una gran variabilidad; en general, le cuesta la memorización y el razonamiento lógico; le cuesta la puntualidad; tiende a ser vanidoso, pero no siempre apegado a las cosas; tiende a la inestabilidad de carácter; cambia de humor conforme a la emoción del momento (del entusiasmo al desánimo, de la alegría a la tristeza); puede ser imprudente por dejarse mover por los sentimientos y no por sus convicciones; tiende a ser desordenado y distraído; puede ser enemigo del esfuerzo y método; es detallista solo cuando quiere; tiende poco al sacrificio y a escapar de la cruz (huyendo de la abnegación); tiende a tener la sensibilidad a la flor de la piel; en general, no termina lo que comienza; falta de convicción (necesita ser empujado para terminar algo), en general, es curioso, dejándose absorber por el mundo exterior, y egocéntrico, siendo propenso a la pereza, a los placeres de los sentidos (gula, lujuria) y a los entretenimientos agitados; poco propenso a la sumisión; fácilmente emite juicios o críticas; puede ser mentiroso, no por dolo sino por la necesidad innata de causar admiración.

Otras posibles características

– El temperamento nervioso se mueve a base de emociones; le gusta la adrenalina, casi para satisfacerse y tranquilizarse;
– no le gusta el horario, ni es metódico; tiende a ser espontáneo y a demostrar su estado de ánimo por el rostro, acciones o palabras;
– puede sentir vivamente las injurias; tiene que cuidar de la tendencia a la vanidad y sensualidad;
– la vida de oración tiende a estar basada en emociones, confundiendo el mundo sobrenatural con el “sentir” a Dios; espera un encuentro con Dios rápido, que satisfaga sus emociones, y si eso no sucede, tiende a desanimarse;
– busca lo nuevo, lo diferente, de acuerdo con sus emociones; puede sentir fuertes tentaciones a la castidad por su variación emocional; puede apegarse mucho a las personas; puede buscar tratar a los otros con acepción (aquellos más agradables a él);
– acerca a las personas de sí, pero no siempre sabe dar continuidad a la formación para la conversión; su inteligencia opera con imágenes, siendo más intuitiva que lógica; en general, prefiere materias emotivas, con repercusiones sentimentales, como geografía, psicología, historia, huyendo de las materias frías o que emplean más la abstracción, como matemáticas, física, etc (no se inclina a las ciencias abstractas y teóricas).

Ejemplos de santo: San Francisco de Asís.

Ejemplos históricos: Baudelaire y Dostoiewski.

¿Y usted, se identifica con el temperamento Nervioso? Haga la prueba aquí y compruebe si estaba correcto. Si sí, manos a la obra en la lucha por la santidad. Reconociendo las propias virtudes y defectos dominantes, el trabajo se vuelve más eficaz.

¡Todo por Jesús nada sin María!