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“Es necesario escuchar al propio corazón”- Audiencia General del Papa Francisco

08/09/2022 . Formações

¡Augusta Reina!

El último día de agosto el Papa Francisco inició una nueva serie de catequesis. Esta vez, después de abordar el asunto sobre la vejez, habla sobre el discernimiento.

En la primera, el Papa nos presenta lo que es discernimiento, y para eso él nos da algunas características:

  • Es importante: “Discernir es un acto importante que se refiere a todos, pues las elecciones constituyen una parte esencial de la vida”;
  • es un ejercicio de inteligencia, pericia y voluntad;
  •  involucra los afectos: “Quien ha encontrado el tesoro no tiene dificultad en venderlo todo, tan grande es su alegría (cf. Mt 13, 44)”;
  •  requiere esfuerzo;
  •  es personal;
  • el discernimiento es arduo, pero indispensable para vivir.

 

San Ignacio y el discernimiento

El Sucesor de Pedro, en esta segunda catequesis, nos presenta el ejemplo de un gran santo de la Iglesia: san Ignacio de Loyola. A partir de su experiencia con las vidas de los santos, en medio de una enfermedad, él aprende a reconocer los signos de Dios de donde estaría la verdadera felicidad.

Pero Ignacio empieza también a notar las diferencias. En su autobiografía —en tercera persona— escribe así: «Cuando pensaba en aquello del mundo —y en las cosas caballerescas, se entiende— se deleitaba mucho; mas cuando después de cansado lo dejaba, hallábase seco y descontento; y cuando en ir a Jerusalem descalzo, y en no comer sino yerbas, y en hacer todos los demás rigores que vía haber hecho los santos; no solamente se consolaba cuando estaba en los tales pensamientos, mas aun después de dejando, quedaba contento y alegre» (n. 8), le dejaban un rastro de alegría.

Aquí el Papa destaca dos características para el discernimiento: el tiempo y el punto de llegada de los pensamientos.

 

El ejemplo de los santos

Para nosotros, San Ignacio deja una pista de cómo los santos nos ayudan en el discernimiento:

Por esto Ignacio sugerirá leer las vidas de los santos, porque muestran de forma narrativa y comprensible el estilo de Dios en la vida de personas no muy diferentes de nosotros, porque los santos eran de carne y hueso como nosotros. Sus acciones hablan a las nuestras y nos ayudan a comprender el significado.

 

Disfrutar de las “sorpresas de Dios”

El Sumo Pontífice retoma un asunto que él ya había hablado: las sorpresas de Dios.

En ese famoso episodio de los dos sentimientos que tenía Ignacio, uno cuando leía las cosas de los caballeros y otro cuando leía la vida de los santos, podemos reconocer otro aspecto importante del discernimiento, que ya mencionamos la vez pasada. Hay una aparente casualidad en los acontecimientos de la vida: todo parece nacer de un banal contratiempo: no había libros de caballería, sino solo vidas de santos. Un contratiempo que, sin embargo, encierra un posible punto de inflexión.

Y después, nos hace unas preguntas importantes para un examen de conciencia ante los acontecimientos diversos en nuestras vidas:

“Tenía que dar un paseo y he tenido un problema en los pies, no puedo…”. Contratiempo: ¿qué te dice Dios? ¿Qué te dice la vida ahí? Lo hemos visto también en un pasaje del Evangelio de Mateo: un hombre que está arando un campo se encuentra casualmente con un tesoro enterrado. Una situación completamente inesperada. Pero lo importante es que lo reconoce como el golpe de suerte de su vida y decide en consecuencia: vende todo y compra ese campo (cf. 13,44)

La importancia del discernimiento

El Papa concluye su catequesis diciéndonos por qué el discernimiento es importante: a través de él escuchamos lo que el Señor quiere decir en nuestras vidas.

El discernimiento es la ayuda para reconocer las señales con las cuales el Señor se hace encontrar en las situaciones imprevistas, incluso desagradables, como fue para Ignacio la herida en la pierna. De estas puede nacer un encuentro que cambia la vida, para siempre, como el caso de san Ignacio. Puede nacer algo que te haga mejorar en el camino o empeorar no lo sé, pero estad atentos y el hilo conductor más bonito es dado por las cosas inesperadas: “¿cómo me muevo frente a esto?”. Que el Señor nos ayude a sentir nuestro corazón y a ver cuándo es Él quien actúa y cuándo no es Él y es otra cosa.

¡Todo por Jesús nada sin María!

 

Lea más

Audienias Generales del Papa Francisco sobre el discernimiento

31 del agosto. Clic aqui

07 del septiembre. Clic aqui

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