Siga nuestras redes sociales

Domingo de Resurrección – ¡Feliz Pascua!

17/04/2022 . Formações

“Cristo ha resucitado”. Este es el acontecimiento nuevo y prodigioso, verdadero e incontrovertible, sobre el que se funda todo; esta es, desde hace mucho tiempo y para siempre, “la piedra angular, desechada por los edificadores. Y en ninguna otra sino en ella está la salvación”.
San Juan Pablo II

“¡Cada vez que rezamos desde el corazón, el Cielo se abre ante nosotros! ¡Cada vez que obedecemos, el Cielo se abre ante nosotros! ¡Cada vez que nos comprometemos con Dios, el Cielo se abre ante nosotros! ¡Cada vez que amamos de verdad, el Cielo se abre ante nosotros! De hecho, el Cielo siempre está abierto para mí. Yo que cierro la ventana de mis ojos de fe cuando no quiero verte. Es asombroso como hay personas que prefieren no adelantar el Cielo en la tierra. ¡Y ya podemos vivir aquí en una sala de espera del Cielo! Para aquellos que sirven a Dios, el Cielo nunca está cerrado. Puedes llamar a la puerta del Cielo en cualquier momento y ser respondido, porque Jesús prometió: “He aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, que nadie puede cerrar” (Apocalipsis 3:8). Esta puerta a la presencia de Dios está abierta de par en par para cualquiera que quiera entrar”. (Padre Alexandre, Meditatio 27/01/2018)

Hoy es el día de la fiesta de las fiestas, de la solemnidad de las solemnidades. Tu luz, oh Cristo, brilla más que el sol sobre todos los seres. ¡Grande es Tu poder y Tu majestad! ¡Aleluya! Abro de par en par las puertas de mi corazón y quiero que Tu luz entre en mi alma con todas sus fuerzas, ¡Señor! Que gran gozo es creer en Ti y vivir en Tu presencia. ¡Tu gloria y Tu esplendor nunca cesarán! ¡Gracias por el don de mi fe, mi esperanza y mi amor! Me vienen de ti, y es gracias a tu acción en mí que hoy puedo celebrar con alegría tu Resurrección. Ha pasado otra Semana Santa en mi vida, por lo que hoy ya partir de ese momento tomo aún más posesión de la verdadera vida que tienes para darme. ¡Te doy gracias y te alabo, Señor! Hoy una vez más os digo de todo corazón: ¡Quiero ser santo! ¡Quiero ser un reflejo de tu bondad y misericordia para el mundo que tanto necesita de tu luz y de tu presencia! ¡Renuncio a todo temor ya toda desconfianza hacia Ti! ¡Tomo posesión de tu gracia! Sé que caeré y necesitaré de tu Misericordia muchas, muchas veces, pero quiero mantener mis ojos fijos en Ti, porque sé que, aunque caiga, Tú siempre me apoyarás y me levantarás.

“A ti, oh Dios, te alabamos,
a ti, Señor, te cantamos, a ti, Padre Eterno, te adora toda la tierra.
A ti te cantan los ángeles,
los cielos y sus potestades: ¡Tú eres Santo, Santo, Santo, Señor, Dios del universo!
cielo y la tierra proclaman
tu inmensa gloria, a ti celebra la gloriosa corona de los Apóstoles,
Alabado seas de los Profetas
, la noble multitud y el luminoso ejército de tus santos Mártires.
A ti en toda la tierra
proclama la Santa Iglesia, oh Padre todopoderoso, de inmensa majestad,
y adorad juntos a
vuestro Hijo único, Dios vivo y verdadero, ya vuestro Espíritu Santo.
Oh Cristo, Rey de gloria,
del eterno Padre Hijo, naciste de una Virgen, para salvarnos.
Al sufrir la muerte,
triunfaste sobre la muerte, abriendo el reino eterno a los que tienen fe en el cielo.
Estás sentado a la diestra
de Dios, del Padre en gloria, creemos que volverás como juez.
Por tanto, te suplicamos que salves a
tus siervos, a quienes tú, Señor, has redimido con sangre preciosa.
Seamos contados,
Señor, te lo suplicamos, en medio de tus santos en tu gloria eterna”.
(Himno Te Deum – A ti, oh Dios, te alabamos)

Avemaría…

Nuestra Señora de Guadalupe, todos los santos patronos y copatronos de la Mirada Misericordiosa, orad por nuestra Semana Santa y por todos los sacerdotes y familias por los que rezamos estos días. ¡Amén!

 

¡Todo por Jesús, nada sin María!

 

PRÓXIMOS EVENTOS